Iniciar una colaboración a través de una Joint Venture

Muchas estrategias de entrada a nuevos países dependen de un socio, y de la manera en que este socio puede ayudarnos a tener éxito en el nuevo mercado. En este caso, si el socio puede tener impacto directo en el éxito o el fracaso de la operación, podríamos plantearnos la colaboración a través de una Joint Venture. La asociación estratégica entre empresas, que denominamos con el anglicismo, Joint Venture, es una alianza estratégica en la que dos o más personas jurídicas intercambian o integran alguno de sus recursos para la ejecución de un proyecto especifico, o para llevar a cabo alguna actividad empresarial.

En este tipo de alianzas, las partes siempre mantienen su propio estatus legal, y el motivo principal por el cual se desarrollan es para maximizar las sinergias operativas, o expandir y/o crear nuevas oportunidades en un mercado. 

Hay varias maneras de colaborar con un partner, ya sea en el mismo país o en otro en el cual queramos expandirnos, pero, ¿por qué deberíamos escoger una Joint Venture como método para conseguir nuestros objetivos?

¿Por qué una Join Venture?

Estos son alguno de los motivos por los cuales una Joint Venture puede ser un método de entrada exitoso: 

1. Combinar expertise: Si los dos o más partners participantes en la Joint Venture son competitivos y expertos en su sector, pueden unir este conocimiento y experiencia para ser aún más competitivos, y por lo tanto, incrementar su productividad y resultados. Además, en el momento de entrar a un nuevo mercado, no se debe crear todo desde cero, sino que gracias a la contribución de cada uno de los partners la situación será más fácil y rápida. 

2. Combinar recursos: En caso de tener recursos limitados, estos se verán incrementados ya que cada uno de los partners puede aportar personal experto, además de tecnologías y recursos especializados. 

3. Reducir riesgos: La contribución de capital y los recursos son algo compartido, y por lo tanto, el riesgo disminuye. Además, en caso de fracasar en el proceso, las perdidas y la posible insolvencia también se comparten, y no será una sola empresa quien hará frente a la situación.

4. Financiación: En caso de ser necesario recibir financiación, es mucho más fácil hacerlo con este tipo de colaboración, ya que la operación estará asegurada por más de una corporación, y transmitirá más confianza a las entidades financieras.  

5. Relaciones empresariales: Trabajar al lado de una corporación local, no solo puede ayudar a crear relaciones empresariales y hacer networking, sino que también contribuye a evitar el riesgo de discriminación por ser una empresa no originaria del país donde se quiere entrar. Asimismo, el partner local puede aportar conocimiento de la situación regional, red de distribución y reputación de los proveedores, y también dar acceso a eventos empresariales estratégicos, conexiones con el gobierno y ventajas de negociación.

6. Superar barreras gubernamentales: En algunos países hay restricciones relacionadas con la creación de capital extranjero, por lo que es necesario unirse a una empresa local para poder implementarse en dicho territorio.

¿Qué deberíamos tener en cuenta en el momento de iniciar una Joint Venture?

Aunque una Joint Venture podría iniciarse con un simple apretón de manos, es siempre mejor definir un contrato donde los futuros partners tengan en cuenta varios puntos:

Alcance de la Joint Venture: Después de encontrar un partner con el que se compartan objetivos, valores, cultura de negocio y estrategia, se deben alinear los intereses y finalidades de la nueva compañía, definir los objetivos de manera clara, y en especial, fijar el alcance y limites de la Joint Venture. Es decir, definir qué hacer y qué no hacer ayudará a evitar conflictos de interés. 

Responsabilidades: Es importante definir como aportarán los bienes y como gestionaran las perdidas y ganancias cada uno de los partners. 

Toma de decisiones: Igual que el resto de responsabilidades, el control de la Joint Venture es algo compartido, por lo que una simple decisión como determinar el precio de un bien puede suponer un problema. Con la creación de protocolos para la toma de decisiones se puede evitar la creación de situaciones embarazosas. 

Planificación diaria: Para conseguir crear una rutina de trabajo fácil y agradable, deben fijarse algunos aspectos prácticos del día a día, como por ejemplo, cómo se llevar a cabo la comunicación entre organizaciones, o cuál será la política de recursos humanos aplicable. 

Aspectos legales: Una cláusula de no competéncia y un contrato de confidencialidad son muy importantes para la relación empresarial en una Joint Venture, asimismo lo es definir las condiciones de finalización de contrato en caso que alguna de las partes quiera finalizar la colaboración.

Conclusiones

En resumen, si los co-emprendedores comparten propósitos, son conocedores de los valores empresariales de su partner, tienen en cuenta el posible cultural gap, y finalmente, se esfuerzan en establecer una cooperación y comunicación fácil y fluida, una Joint Venture será probablemente exitosa, y hará que las empresas alcancen sus metas y objetivos.